En cuanto entramos al probador e intercambiamos las primeras frases capté la idea del vestido de novia que buscaba.
Optó por un modelo de MANU GARCÍA; con falda de organza y cuerpo en encaje efecto tatuaje.
Nunca me he conformado con vender vestidos, siempre he querido buscar un look final coherente con la personalidad de la novia, para ello son muy importantes los complementos.
Cuando Silvia me comentó que no le gustaban nada los zapatos blancos le sugerí que optara por llevarlos de su color favorito; en este caso fucsia.
De ese tono se los hizo personalizados JOSÉ ILLANA, del maquillaje (regalo de su hermana y su amiga Cristina) se encargó LUCÍA PUEBLA, maquilladora favorita de nuestra protagonista y el original ramo fue creación de la FLORISTERÍA GLOXINIA.
Como anécdota, no puedo evitar mencionar la protagonizada con la hija de Silvia; Carla.
La niña acompañó a su madre a una de las pruebas del vestido y me fijé en cómo no perdía de vista mi melena, un poco más larga de lo habitual en ese momento. Mirándome fijamente y con cierta timidez acertó a decirme; "eres como Rapunzel".
"Soy su hermanita" le contesté, intentando alimentar la fantasía infantil, a lo que ella espetó con acierto: "no, tú pareces la madre de Rapunzel", dejándome claro que con tres años se es pequeña pero no tonta.
